Que la inocencia de un niño,
que la cadera de una anciana
o que un cachorro abandonado
es mi corazón
de cemento y alambre.
No lo roces
con la punta de los dedos:
no me obligues a desgarrar el tuyo
con estas uñas
llenas
de polvo
y rabia.
Ana Patricia Moya. Píldoras de papel. HUERGA Y FIERRO EDITORES, 2016.
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