viernes, 25 de febrero de 2011

"Hoy todo va mal, y según pasan los días será peor, hasta que venga lo peor de todo". Arthur Schopenhauer.

Hoy todo va mal, y según pasan los días será peor, hasta que venga lo peor de todo”.
Arthur Schopenhauer.


Tu corazón siempre me cupo entre las manos
Era blando y similar al engranaje de una noria
Te amé tantas veces en lo alto de una noria
Que tu corazón se hizo similar a la noria
Antes te desnudabas enseguida
Ahora tengo que amenazarte con un arma y no es lo mismo
No siento lo mismo
¡Esa brizna tejana luchando contra mis neuronas!
Aquellas ballenas en tropel hacia mi infancia
Mi infancia es un enorme campo de golf
Donde el venado corre en círculos
Formando círculos que se beben con pajitas gigantes
En el dormitorio todo es de cuero
Y el resultado es la brizna tejana
Hilvanada con infartos estivales
Fútil será la carcajada del inmueble
Cuando mi trono erguido regrese a la Tierra
Cabizbajo me arrancaré la pierna para alimentar
(Una vez derretida)
Los agujeros de plasma de tu moneda inflada
Que contiene infancia
Que contiene la más remota de las playas
Y tu vientre olerá a remo
¡Morderé si es menester las esquinas de la bofetada!
Un busto lacerado por el paso del tiempo
Aniquilado por el cielo y su lluvia
Y su inclemente nieve
Tu abrazo de sangre con esas manos minúsculas y saladas
La parodia de mi vida a escena cada dos días
Los peces de colores de la yerma botella
Apenas dejaban gusto a cordero en la boca
Esa boca con todos esos dientes
Paseándose por el aparcamiento abandonado
Tu falda tejana llovió anoche de mi techo
Mi techo con su gaznate pidiendo auxilio
Tu pecho con guijarros pidiendo colores
Mi luna hoy más blanca que nunca derritiéndose
Sobre coches e inmuebles
Suena a pisadas de automóvil
Suena a todo un día de acá para allá pidiendo limosna
Ese pliegue de pescado sobresale de mi alma
Es un relieve del que nacen flores
Y escamas
Y Napoleón haciéndole muecas a mi esposa
Mi esposa se sirve en platos
De primero sus senos
De segundo su sexo
Y de postre su alma
Me he comido a mi esposa
La he masticado
Yo que siempre sudo agua sucia del retrete
De ella ya no queda nada
Mientras observo la exposición de puertas pienso
Que las mujeres no deberían ser modelos de pasarela
Deberían serlo las puertas
Ya que las puertas son las únicas verdes y rojas de verdad
Y las mujeres carecen de gozne y pomo
Toco la guitarra mientras observo la exposición de puertas y pienso
Que debería haber más museos de puertas
Más exposiciones de puertas
Pero tras reflexionar admito que no somos suficientemente hermosos
Para ellas
Las puertas nos prohibirían la entrada a sus museos y exposiciones
Ya nadie podrá volver a mirar de forma obscena a las puertas
Esas hermosas puertas verdes y rojas
Esta fría mañana volveré al páramo de las máquinas de hacer café
Volveré a caer por la cuneta de las carreteras
Volveré al Stop donde suspendí el carnet de conducir
Volveré a vagar sin objeto por los bulevares del puerto
Porque no puedo tocar la guitarra
Porque no puedo introducir el puño
En el órgano de la palabra del pan
Si al menos pudiera mirarte
Antes te miraba durante horas y horas sin decir palabra
Te miraba con los ojos y con las manos
No te quería sólo quería mirarte
Pero esa verdad lo estropeó todo
Pensabas que te quería cuando en aquellos años te miraba y te miraba
Y tú sonreías
Ahora no puedo mirarte
Te has ido y lo único que puedo mirar es esta cafetería de vidrios sucios
Debí decirte que te quería
Así hoy podría seguir mirándote en vez de mirar esta cafetería
Que se derrite manchándome los zapatos
Con esa brizna tejana como ramas de elefante muerto
Mis células en fila y despacio se disponen a evacuar la nave
Me detestan como yo las detesto a ellas
Me pierdo en este muelle de metal
Puedo ocuparme del alma para matar el rato
O de la carne
Pero exige mucho esfuerzo
Creo que me sentaré delante de la cafetería de vidrios sucios para mirarla
El cielo se derrite precipitándose a la Tierra en forma de pantalón vaquero
Miles de personas morirán en su lava
Lava de pantalón vaquero
Pantalón vaquero que penetra por sus gaznates asfixiándolos lentamente
Yo me escapo en mi coche de carreras junto a Napoleón
Él no lleva casco
Dice que su cabeza tiene más de dos mil siglos
Y que está hecha de piel de dinosaurio
De sus orejas salen despedidos viejos bibliotecarios
Que mueren en la lava del pantalón vaquero
Napoleón tiene un ojo cerrado y otro abierto
Y la nariz es de quita y pon por lo que tiene varios ejemplares
Ahora lleva una chata
“Para ir más deprisa” dice
Yo obedezco todas sus órdenes
Napoleón calcula que llegaremos a París enseguida
Si no hay tráfico
Dice que París me gustará
Le gusta a todo el mundo en cualquier época
Estoy deseando llegar
Pienso tan intensamente en todas las cafeterías que podré mirar
Que me sangra la nariz
Entonces Napoleón me ordena que baje del coche de carreras
Yo obedezco y él se va
A Napoleón no le gusta la sangre
Odia la sangre
No podré ir a París
No debí sangrar
Pero me consuelo porque al menos podré mirar esta cafetería de vidrios sucios
El cielo se ha derretido ya y no corro peligro
Me acuerdo de ti
De tu forma de coger el tenedor
De cómo solías abrir la puerta
De la manera que tenías de taparme los ojos para que dejara de mirarte
Todo eso se acabó para siempre
El viejo que lee el periódico me aconseja que espere
Que no salga todavía
Que espere a que escampe
Llueve con mucha intensidad
Seguro que las gotas de lluvia serían como balas en la piel de este anciano
Que si saliese moriría a los pocos metros del local
ACRIBILLADO
Lee su periódico tranquilo
Ajeno al peligro que supone para él esta lluvia torrencial
Quizá deba hacerle caso
Quizá también para mí
Que carezco de células
Esta lluvia sería mi final
Pero sería un hermoso final
Fantaseo mientras ojeo una revista pornográfica
Con que salimos el anciano y yo de este local salvador
Y morimos bajo la lluvia
Imagino lo que pondría en los diarios
Los centenares de programas televisivos al respecto
La idea casi me convence
Pero no
Seguro que el anciano se negaría
Diría que no quiere morir
Que tiene hijos y nietos
¡Cobarde!
En este estúpido local para viajantes hay poco que mirar
Una cajera gorda un viejo cobarde leyendo el periódico
Una chica joven con aspecto punk
No hay nada interesante que mirar
Si estuvieses aquí podría mirarte
Mirarte y mirarte
Pero eso se acabó para siempre
Cómo odio el verano
Con sus playas
Con sus chicas enseñando las tetas
Con sus modas en trajes de baño
Cómo odio el verano
Ese puto viejo se niega a salir conmigo bajo la lluvia.

Inacabado.


Del poemario inédito "Diario de un adolescente de pelo raro".

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